The Mamas, ahora solas a Eurovisión
El 60º aniversario de Melodifestivalen contó, de nuevo, con 28 canciones participantes, de todos los estilos y para todos los públicos. Desde nombres míticos como Nanne Grönvall, Jan Johansen o Linda Bengtzing, a otros de reciente fama como Felix Sandman, Robin Bengtsson o Anna Bergendahl. La celebración incluyó la presencia en los intermedios de estrellas del pasado que hicieron disfrutar a los amantes de la nostalgia y la mitomanía. No obstante, las galas fueron un tanto irregulares en cuanto al nivel de los temas en concurso y a la final no pudieron llegar varios pesos pesados que la hubieran enriquecido en variedad y ritmos. El triunfo final fue por un solo punto de diferencia.
La victoria recayó, inesperadamente, en Move, un nuevo tema de inspiración góspel, siguiendo la estela del ganador del año pasado. Manteniendo el mismo estilo y con una innegable capacidad vocal y escénica, van a repetir el formato y el género musical con la esperanza de conseguir otro buen resultado. No obstante, no resultaría extraño que la fórmula diera ya muestras de agotamiento tras los tres intentos consecutivos de austriacos y suecos de los últimos años. Los autores de Move son tres debutantes en Melodifestivalen: Melanie Wehbe, Patrik Jean y Herman Gardarfve, que han conseguido superar a veteranos como G:son, Ljunggren, Janson o Wrethov, con uno o más temas cada uno en la final.
Las intérpretes de Move son el trío The Mamas que formaron parte del coro que acompañó a John Lundvik el año pasado en Tel Aviv, con bastante éxito en la votación final. Allí fueron cuatro, pero solo tres dieron el paso de concursar en este Melodifestivalen: Ash Haynes (33), americana residente en Suecia de manera definitiva desde el año pasado, Loulou Lamotte (38), de Malmö, y Dinah Yonas Manna (38), de Estocolmo. Las tres han sido coristas de varias figuras nacionales e internacionales como Jonas Gardell, Eric Saade o Katy Perry. Su pasión por el soul y el góspel las unió junto a Paris Renita (la cuarta miembro) el año pasado, estableciéndose como trío tras Eurovisión 2019.