AEV elige la primera de las Siete Maravillas de Eurovisión: Poupée de cire, poupée de son

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Los socios de AEV han hablado y ya conocemos la Primera Maravilla de la historia de Eurovisión: Poupée de cire, poupée de son. La canción que representó a Luxemburgo en 1965 se ha erigido como la más votada de las preseleccionadas entre los 140 temas que se presentaron al festival durante su primer decenio de historia, entre 1956 y 1965. En esta primera fase de la votación de las Siete Maravillas se han sumado los votos de 62 socios y fuera han quedado tres votaciones nulas.

El objetivo de esta votación es elegir las siete mejores canciones de la historia de Eurovisión seleccionando un tema de cada decenio de historia del festival y celebrando una repesca final entre las mejor clasificadas de cada bloque de 10 años. En cada fase daremos a conocer solo la canción ganadora y los cuatro temas que completan el top5 sin desvelar las puntuaciones, algo que se dará a conocer cuando termine todo el proceso de votación.

CUATRO CANCIONES TENDRÁN UNA SEGUNDA OPORTUNIDAD

Las cuatro canciones que pasan a la repesca y que son, por tanto, candidatas a Séptima Maravilla, son las que enumeramos seguidamente. Recordamos que el orden en el que figuran es el cronológico en el que se presentaron al festival y que no tiene por qué coincidir necesariamente con el orden de votos que han recibido en la votación:

1958 Italia – Nel blu dipinto di blu (Volare) – Domenico Modugno

1963 Suiza – T’en vas pas – Esther Ofarim

1964 Italia – Non ho l’età – Gigliola Cinquetti

1965 Reino Unido – I belong – Katy Kirbi

Por otro lado, recordamos a los socios de AEV que el próximo 1 de abril comenzará la elección de la Segunda Maravilla, el mejor tema del decenio 1966-1975. Para esa fecha, los socios recibirán en su correo electrónico la lista de canciones candidatas y las instrucciones para votar correctamente. Desde aquí les animamos a que tomen parte activa en esta votación de AEV.

CLASIFICACIÓN DE LAS RESTANTES CANCIONES

A continuación ofrecemos la clasificación de las canciones que quedan apeadas de la carrera por no estar entre las cinco más votadas del decenio 1956-1965.

6º	1961 España – Estando contigo	211
7º	1963 Dinamarca – Dansevise	189
8º	1960 Francia – Tom Pilibi	169
9º	1962 Francia – Un premier amour	159
10º	1963 Luxemburgo – À force de prier	132
11º	1961 Luxemburgo – Nous les amoureux	100
12º	1959 Italia – Piove	99
13º	1956 Suiza – Refrain	96
13º	1961 Reino Unido – Are you sure?	96
15º	1965 Austria – Sag ihr, ich laß sie grüßen	89
16º	1959 Países Bajos – Een Beetje	80
17º	1958 Suiza – Giorgio	78
18º	1962 Alemania – Zwei kleine Italiener	75
19º	1959 Reino Unido – Sing, Little Birdie	64
20º	1962 Finlandia – Tipi-tii	54
21º	1960 Noruega – Voi-voi	42
22º	1957 Países Bajos – Net als toen	39
23º	1958 Francia – Dors, mon amour	34
24º	1960 Países Bajos – Wat Een Geluk	32
25º	1959 Francia – Oui, oui, oui, oui	31
26º	1961 Suecia – April, april	24

 

 

UNA YE-YÉ FRANCÓFONA CONVENCE A LOS VOTANTES

France Gall tenía 17 años cuando defendió en Nápoles el tema Poupée de cire, poupée de son, uno de los grandes hitos del pop de los años 60. Fue cantada en más de 20 idiomas distintos y versionada por infinidad de artistas de todo el mundo. En la España de 1965 oímos la canción en la voz de artistas como Karina, Conchita Bautista o Rosalía. Además, con el paso del tiempo se ha convertido en todo un clásico de la música y en nuestro país ha sido versionado recientemente por los grupos Nosotrash o Nena Daconte.

Poupée de cire, poupée de son está compuesta por todo un mito de la canción francesa, Serge Gainsbourg, artífice de la melodía Je t’aime (moi non plus) y conquistador de féminas como la mismísima Brigitte Bardot. Serge Gainsbourg compuso canciones para Jane Birkin o la propia France Gall y además escribió dos temas más para Eurovisión, Boum badaboum (Mónaco 1967, 5º puesto) y White and black blues (Francia 1990, 2º puesto).

La intérprete fue una de las chicas ye-yé más solicitadas de la década de los 60, la parisina France Gall. Era hija de Robert Gall, creador del gran éxito de Charles Aznavour La Mamma. Con su aire de adolescente y su peculiar peca bajo el ojo derecho, France Gall se presentó en 15º puesto en Eurovisión 1965 y logró 32 votos, siendo puntuada por 10 jurados de los 17 posibles. En aquellos tiempos, este perfil de jovencitas minifalderas con temas pegadizos era el que solía convencer a los jurados europeos, recordemos que Sandie Shaw ganaría con 20 años, Massiel con 21, Lulu con 19 o Dana con 18 años.

France Gall no era ni mucho menos una debutante. En 1963 su ilustre padre se dio cuenta de la buena voz de su retoño y la animó a ser audicionada por los cazadores de talentos franceses. Firmó contrato con Philips y lanzó su primer hit, Ne sois pas si béte, el día que cumplía 16 años. Luego vino la colaboración con Gainsbourg a través de los temas Ne ecoute pas les idoles, Laisse tomber les filles, la eurovisiva Poupée de cire, poupée de son o Baby pop. Todas las canciones son éxitos instantáneos aunque Gainsbourg escribe letras llenas de dobles intenciones. El texto de Poupée de cire, sin ir más lejos, habla de lo contradictorio que resulta que una jovencita sin experiencia le cante al amor. Mayor cola trajo Les soucettes (Los chupa-chups), una canción con referencias explícitas a la felación y al sexo oral, y lo cierto es que la inocente France Gall tardó en pillarle el doble sentido a versos como «Cuando el azúcar de caña fluye por la garganta de Annie, ella está en el cielo«, lo que bastó para acabar con su colaboración artística con el maestro Gainsbourg.

En 1968 France Gall comenzó su era «Post Gainsbourg», una etapa artística que la llevaría a versionar hits extranjeros (cantó el tema La pioggia de Gigliola Cinquetti como L’orage), participar en varios musicales y a cantar con el mismísimo Elton John, quien se sintió muy atraído por la voz de la francesa. El prematuro fallecimiento de su hija en 1997 la apartó de los escenarios aunque parece que se está planteando un retorno para 2015.