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Nana Mouskouri una griega exquisita

Fran_Diaz_PerezEl festival de Eurovisión de 1963 es según para muchos eurofans unos de los mejores de la historia en cuanto a calidad musical. Plagado de artistas conocidos sino en ese mismo año en años posteriores, era un festival de esos de los antiguos donde se mezclaban varios estilos típicos de una época en la que la modernidad iba a diferentes velocidades recorriendo Europa. De esos festivales para algunos tan añorados donde primaba la calidad de las canciones y no el puro espectáculo, ni coreografías ostentosas ni melodías imposibles a las que estamos acostumbrados ahora, pero claro, era otra época. Festival que inauguró las victorias nórdicas en el palmarés, mientras que España ya en fechas tan tempranas adquirió la mala costumbre de llevar muy buenos intérpretes con canciones horribles, Luxemburgo que nunca fue un país de tontos, enviaba al festival a grandes representantes, con renombre a nivel europeo para que consiguieran la victoria, en este caso no fue menos y llevó a una de las cantantes griegas más conocidas no ya a nivel europeo, sino a nivel mundial, una cantante de voz única, exquisita, una cantante de esas que sólo hay una entre un millón. Esta semana se asoma a esta sección la gran Nana Mouskouri.

Erase una mujer pegada a unas gafas de pasta

Y es que si hay algo que caracteriza totalmente a Nana es sin duda la presencia de ese par de gafas de pasta negra que siempre la acompañan donde vaya, desde que cantó por primera vez y estoy seguro que se irá con ellas al más allá, porque no creo que haya nadie en este mundo capaz de quitarle esas gafas. Querida, por lo menos podrías cambiarlas que ahora hay diseños muy monos y baratitos, ya sé que en tu época no había, pero ¿Conoces las lentillas, cari?, en fin, que igual sin ellas se queda ronca o pierde la voz, quien sabe.

Nana, como buena estrella que se precie comenzó su carrera a temprana edad y ni siquiera la Segunda Guerra Mundial fue capaz de apartarla de su camino, empezando la muchacha sus andares cantando en los clubs de Athenas. Como eso de los clubs se le quedaba pequeño a ella, empezó a interesarse por los festivales donde había mucho más público que la viera y así, ni corta ni perezosa, se presenta Nana en el primer festival de la Canción Helénica en 1959 con los temas Kapou iparchi i agapi mou y Asteri Asteraki donde consiguió el primer y el segundo premio. Desde chica ya le gustaba a ella acaparar, aunque a día de hoy no se sabe si fue por la calidad de las canciones o por la lástima que le dio a los jueces que al verla con semejantes gafas (que mira tú por dónde se llevan ahora muchísimo) pensaron seguramente: vamos a darle el triunfo a esta muchacha que con semejante miopía no puede llegar a ninguna parte. Que equivocados que estaban.

Como había quedado tan bien, no se le ocurre otra cosa que presentarse al año siguiente, porque pensó si he ganado una vez, puedo ganar otra, y llevó otros dos temas Timoria y Kaparissaki, y mira tú por dónde que vuelve a ganar, muerta se quedó ella, más aún cuando le llovieron los contratos como churros; empezaba ya a brillar su estrella.

Como ya estaba cansada de ganar siempre lo mismo, la pequeña Nana pensó en conquistar otros países, porque ya Grecia le quedaba muy pequeño, así que se presenta al Festival de la Canción Mediterránea en Barcelona con el tema Xypna agapi mou, y lo vuelve a ganar. No puedo con la Nana.

 

Tras esta nueva victoria le llegaban los contratos de cualquier parte, comenzado otra de las características que haría que se hiciera hiperfamosa, la facilidad que tiene la griega de cantar en cualquier idioma conocido, y eso que ella originalmente hablaba una de las conocidas como lenguas muertas, bueno, tan antigua no era la muchacha, pero casi. Y es que Nana será miope, pero no ciega y ella se dio cuenta de que al cantar en el idioma de los diferentes países era mucho mejor acogida por el público.

A principio de los sesenta fue requerida por televisiones de Escandinavia, Alemania e Italia, mientras que Francia se convertiría en su país adoptivo. Alternó artísticamente, que no en un bar de copas, con Edith Piaf, George Brassens, Charles Aznavour y Alain Barrière. Su primer trabajo en Alemania se tituló Weisse Rosen aus Athen, vendiendo más de un millón de discos.

 

De ahí se fue la griega a los Estados Unidos donde grabó The girl from Greece sings, estando bajo la tutela de Quincy Jones, donde a pesar de ser ya una ciudadana del mundo y hablar en el idioma que le echen no olvida sus raíces haciendo que los sonidos mediterráneos helénicos se hicieran populares. En Londres grabó My colouring book por lo que también se hizo famosa en el Reino Unido.

En Francia le fue concedido el Gran Premio de la Academia del Disco con lo que autores de prestigio se pelearan por ella, gracias a esto Michel Legrand le compuso Les parauplies de Chebourg, para la película del mismo nombre de 1965  banda sonora que se hizo inolvidable.

 

Un gran éxito de Nana fue el tema L’Enfant au tambour en 1965, ¿A alguien le suena esta canción? Pues es el tamborilero de toda la vida, ese que hizo tan famoso en España Raphael. Podéis ver el video más abajo para que decidáis que diva lo hace mejor, perdón, quería decir si la Nana o el Raphael.Ese mismo año, graba en Estados unidos otro éxito Nana sings.

 

En 1967, conoce a Harry Belafonte con el que graba algunos trabajos y hace varias giras por Estados Unidos y Canadá, sumando ocho millones de discos vendidos, por lo que también conquista las Américas, pero mira tú la vista que tiene la miope esta. Mientras sigue grabando trabajos en francés como Le jour oú la colombe y canciones míticas como Au coeur de Setembre, Adieu Angelina o Robe bleue robe Blanche.

 

En 1975 ya tenía, nada más y nada menos que 35 discos de oro conseguidos en todo el mundo, a sus 41 años era una artista universal con veinte años de carrera musical conviertiéndose en un mito. Por ello, como se aburre, inicia una etapa de mestizaje musical con música griega, francesa y africana  y es que ella a estas alturas puede hacer lo que le salga de las…..gafas….

Solo comete un error la gran Nana y es conocer a Jose Luis Moreno, ya que por su culpa la tuvimos hasta en la sopa porque apareció en multitud de esos maravillosos cortitos y super culturales programas del Moreno, esos que presentaban niñas con los pechos casi fuera y muchachos muy monos pero que no tenían dos dedos de frente, que supongo yo que habían conseguido el trabajo porque eran muy “amiguitos” del moreno, de ahí una de las más famosas frases de uno de sus míticos personajes….“toma moreno”.

Con su trabajo Je chante avec toi liberté que grabó en varios idiomas obtuvo un gran éxito de ventas en Europa. Inicio giras por los cinco continentes, volviendo a cantar en Grecia en  la mismísima Acrópolis en1984 tras 22 años de ausencia en su tierra natal.En 1988 grabó una serie de discos inspirados en Óperas Universales como Norma.

 

Ya en la década de los 90 nuestra artista polifacética y miope hace de todo:  graba un trabajo Gospel, una gira por Alemania y los países del este, un disco de canciones de películas de Hollywood, es declarada embajadora de UNICEF, empieza una carrera política en el parlamento europeo, sigue grabando discos como churros donde le da ella su real gana como Return of love en Estados Unidos, Nana latina en America latina o Hommages en Francia.

Aquí la amiga Nana ha batido récord ya no sólo por ser la artista que más tiempo ha llevado unas gafas puestas y ha hablado hasta el tagalo, sino que desde que empezó su carrera ha grabado más de 1350 canciones y vendido millones de discos, por eso tiene ella esa cara de felicidad perpetua.

A fuerza de rogar se comió un colín en el festival

Mucho se frotaban las manos los luxemburgueses cuando se aseguraron la participación de Nana Mouskouri en el Festival de Eurovisión, pero al final se quedaron con las manos vacías porque la gran diva que había ganado todo no consiguió pasar del octavo puesto en el festival.

La canción A forcé de prier ( a fuerza de rogar ) es un himno a la fe y a la insistencia del amor, una canción muy típica de la época y muy acorde a la cantante pero que no caló en el jurado, o más bien yo creo que como estaban seguros de que ganaría ella no la votaron pensando que lo harían los demás, vamos lo típico que le pasa a España todos los años porque seguro que es por eso, con las buenas canciones que llevamos siempre……

Vamos que la pobre Nana se encerró en su camerino tras el desastre eurovisivo y se puso a llorar como una posesa, pero menos mal que llevaba sus gafas de agua y no se le notó nada a la pobre, pero querida no se puede tener todo. De hecho, yo pienso sinceramente que aprendió a hablar tantos idiomas para decirle cuatro cositas a todos los jurados que no la votaron porque estas muchachas que parecen unas mosquitas muertas luego tienen un genio que no veas.

 

La verdad que lo hizo muy bien, cantó de forma magistral y estuvo muy sobria con ese traje negro muy acorde con la época, pero ya por aquellas fechas no había quien entendiera a los jurados. Estaba claro que debería haber quedado en un mejor puesto, entre los tres primeros sin duda, pero la vida es así de injusta hasta para los mitos musicales.

Nana en la actualidad

En la actualidad, Nana tiene la poca despreciable edad de 79 años, por lo que se encuentra dedicada a sus labores, es decir a dormir la siesta todo el día, atiborrarse de pastillas y si puede a liarse con un muchachito de 60. Un merecido descanso para una artista mítica cuya voz y cuyas canciones se recordaran siempre.

La presencia de Nana Mouskouri en Eurovisión es otro claro ejemplo de que un nombre conocido no asegura una buena posición por otra parte la participación de la cantante griega no ha servido de ejemplo para otros cantantes posteriores, sobro todo para la representante israelí de 2013 Moran Mazor, que no intuyó que copiar el estilismo de la griega, con esas gafas tan discretas, le traería el mismo fracaso que a ella.