La G:ssonmanía

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Juanma López-Arena

Un festival de Eurovisión de alto nivel se merece una ganadora de alto nivel. Es verdad que este año todos andábamos de un lado para otro con la coletilla «la edición de este año es muy buena». Pero entonces, que un artista consiga 372 puntos significaría dos cosas: o que la edición, en realidad, no es tan buena, o que la ganadora es extraordinaria. Me inclino a pensar lo segundo. Es más, me inclino a pensar que era la canción que más destacaba de todas, y por eso ganó. Porque en realidad, Eurovisión se trata de eso, de destacar.

La interpretación de Loreen fue magistral. Aunque es cierto que la aderezaron con un poco de «reverb», que no le venía mal a la canción, lo cierto es que el tema fue defendido muy bien por la joven sueca, independientemente de sus atragantamientos en el ensayo del jurado. La puesta en escena tuvo mucho que ver con el triunfo también. Un espectáculo especialmente preparado para la televisión, pero que en directo deslucía un poco.

Pero de quien sin duda es el mérito de la canción es de los compositores, aquellos seres muchas veces olvidados en Eurovisión, que son los verdaderos artífices de los triunfos. Para uno de ellos, en particular, este debe haber sido un triunfo muy especial, ya que lo persigue desde 1999.

Con 31 canciones en Melodifestivalen y 20 más en otras tantas preselecciones europeas, Thomas G:sson es, a sus 44 años, el compositor más prolífico de la historia de las finales nacionales en Eurovisión. Recordemos que Ralph Siegel ha compuesto 20 canciones para Eurovisión, pero en total con las de las preselecciones solo suman 32, frente a las 51 de G:sson. Por su parte, el músico sueco ha conseguido colar en la final de Eurovisión a 7 canciones, entre ellas 3 suecas, 2 españolas, 1 danesa y 1 noruega.

Thomas G:sson, compositor junto a nuestro socio Tony Sánchez de «Quédate conmigo», también compuso junto al canario, «I love you, mi vida» en 2007. Asimismo, fue el compositor de las canciones suecas de 2001, 2006 y 2012, año en el que por fin ha conseguido el triunfo con un tema que firma él mismo junto a Peter Boström. No hay que olvidar tampoco las canciones «Ven a bailar conmigo» (NO 07) y «In a moment like this» (DK 10), esta última, su mejor posición hasta el momento, un cuarto puesto.

Pero lo que de verdad sorprende de G:sson es su versatilidad. Thomas es un compositor que igual compone el «Samba Sambero» de Anna Book en 2007, que «Land of the broken dreams» este año o «Silverland» de Roger Pontare en 2006, incluso la propia «Euphoria» vencedora de Eurovisión. Su facilidad para adaptarse a cualquier estilo musical es impresionante. Sin embargo, donde G:sson es el rey es en el schlager de toda la vida. ¿Qué sería Melodifestivalen sin «Världen Utanfön», «Hela världen för mig», «Idag och imorgon» o «Something in your eyes». Ese estilo que tanto nos gusta y que, gracias a G:sson entre otros, sigue vivo en Eurovisión.

Este año tuvimos la suerte de ver a G:sson en la preselección española y nos encantó oírle hablar tan bien de Pastora. Que un compositor de su talla se rinda ante la voz y la profesionalidad de la Soler es digno de admirar. El trabajo que ha hecho todos estos años junto con Tony Sánchez se ha visto por fin recompensado con un meritorio décimo puesto que devuelve la ilusión a España y pone nuestras esperanzas a tope para 2013. Tony y Thomas, ese genial tándem que esperemos que nos dé muchas más alegrías.

Pero Además G:sson ha hecho su sueño realidad, ha ganado el festival de Eurovisión con una canción que, además, está batiendo récords en toda Europa y que tiene pinta de convertirse en el éxito del verano en muchos países, lo que esperemos que le reporte la energía y la ilusión necesarias para seguir haciéndonos tan felices con sus composiciones.

Y esto no ha hecho más que empezar. La verdadera G:ssonmanía.