¿Qué hacemos con los frikis?
Jacques
Los eurofans hemos visto a lo largo de la historia del ESC montones de géneros musicales y los hemos acogido generalmente con interés. ¿Todos los géneros? Pues no, hay uno que claramente conlleva todo nuestro desprecio: lo friki malo. La edición de 2008 fue la del súmmum de este tipo de antimúsica que prima el hecho de llamar la atención a la calidad vocal y creativa. Todo esto se contrapone al «frikismo bueno o de calidad«, es decir, a artistas excéntricos que, a pesar de llamar la atención, han llevado a Eurovisión propuestas interesantes. Desgraciadamente todos los frikis, -los buenos y los malos-, han ido a parar al mismo saco, llegando a compararse injustamente a Lordi con Rodolfo Chikilicuatre. Mi intención no es meterme en ediciones antiguas porque imagino que tiempo habrá cuando acabe el festival de este año. Lo que haremos ahora será tratar todo lo friki que pasará por Bakú el próximo mes de mayo.
A estas alturas ya sabemos todos que Rambo Amadeus cantará Euro-neuro, una sátira a la (desgraciada) situación sociopolítica actual de Europa en general y de los Balcanes y Montenegro en particular. Amadeus es el artista de este año que mayores palos se ha llevado del colectivo eurofan (Montemi*rda, basurón y demás cariñosos apelativos). Parece que es una constante para los eurofans que todo lo que se salga del cliché “diva, canción disco, ventilador”, -el sota, caballo y rey eurovisivo-, es una porquería sin más.
A mí, en cambio, me gustaría destacar que el representante montenegrino es un veterano de la escena del país y que este tipo de música es habitual en su carrera. No se trata de un advenedizo que cantará en Eurovisión y desaparecerá al día siguiente (como Chikilicuatre) sino que lleva 24 años en el mundo del espectáculo haciendo canciones sarcásticas sobre la política de su pequeño país y tocando géneros musicales dispares. Entre los eurofans no gusta, pero como soy el abogado del diablo, yo me alegro de que le tengamos en Eurovisión por la crítica social que aportará con su canción. Constantemente vemos noticias que demuestran que Europa no es el paraíso que se nos ha hecho ver durante tantos años y que existen desigualdades inmensas. Además, la letra de Euro-neuro es mucho más inteligente que la petardez portuguesa del año pasado. A mí la idea de aprovechar el Festival de Eurovisión para hacer una denuncia social me agrada, el problema es que estas cosas, hechas de un modo más sutil y no tan explícito como hicieron los Homens da luta, llegan más a la gente.
Otro momento friki nos llegará con las abuelitas rusas. Esta canción no tiene tantas críticas como la montenegrina porque los eurofans saben de sobra que pasará a la final y que, incluso, se llevará un puesto en el top10. Rusia ha llevado a sus primeras figuras desde que debutó y ha sabido muy bien qué llevar a cada momento para quedar bien, aunque patinaron en el jurado el año pasado con Alex Sparrow. Las señoras de Buranovo cantaron en iglesias de los montes Urales durante años hasta dar el salto a la televisión en 2010 y empezar a llamar la atención por el contraste de cantar música disco siendo todas ellas abuelas ataviadas como una Doña Rogelia de gala. Tienen voces cascadas por los años e interpretan una canción disco aceptable, lo que chirría es la combinación, que es precisamente el secreto de su éxito. Si Verka Serduchka quedó segunda, digo yo que estas señoras arremolinarán el voto del Este y de buena parte del Oeste. Yo sigo el ritmo del tema con agrado y mucho me temo que en España los detractores de Eurovisión lo usarán al día siguiente para argumentar las razones por las que el festival debe desaparecer de la faz de la Tierra.
Quien lo tiene más negro para pasar es el grupo austriaco Trackshittaz. Después de la delicada contribución del año pasado, el numerito que llevarán a Bakú es indefendible. Mira que me gustan las causas perdidas, pero por más que veo el videoclip de este tema no encuentro argumentos para apoyarles. Creo que moverán muy poquitos cucús en Europa, como pretenden, y es posible que la gente aproveche la canción para ir a hacer popó. Llevar algo tan poco eurovisivo como el rap y no edulcorarlo con otro género, como hizo en su momento España en 1993, Reino Unido en 1995, Bosnia en 1999 o Alemania en 2000, sabemos que puede ser un fracaso absoluto y que Austria verá la final desde el banquillo.
Vienen ahora una serie de canciones a las que el apelativo friki les vendría grande y yo preferiría denominarlas «excéntricas» en el contexto del ESC de este año. En primer lugar hablaré del grupo israelí Izabo, que viene este año con ganas de vengar a Dana International. He tenido mis dudas a la hora de incluirlos en este repaso por lo más freaky del año porque para nada les considero frikis ni ridículos, pero creo que el eurofan purista sí que lo hará. La canción Time tiene un sonido y un ritmo muy interesantes. Personalmente me recuerdan al memorable grupo letón Brainstorm, por lo happy de la canción, pero habrá que esperar a verles en directo.
Creo que muchos meterán en el saco friki a la holandesa Joan por el penacho de plumas que saca en su actuación. Superado el impacto de ver el aderezo, tengo que decir que la canción me parece bonita pero muy antigua, muy en la línea de los desaguisados que está haciéndonos Holanda desde 2003. Muchas canciones holandesas de los últimos años me gustan pero reconozco que no están hechas para pasar de una semifinal eurovisiva. Al principio me llevaba unos disgustos tremendos, pero ya estoy acostumbrado a que este país se hunda, por lo que no me extrañaré cuando vea que el sobre de Joan no se abre el día de su semi.
Otro friki, al menos por la estética que saca, es Anri Jokhadze, el representante de Georgia. Su I’m a joker no deja de ser pegadizo, creo que es la primera vez que este país nos obsequia con algo desenfadado. Yo en el 2009 me quedé con las ganas de bailotear el We don’t wanna put-in’ en Moscú, pero reconozco que no tocaba ser tan explícitos si pretendían criticar las políticas rusas con Georgia. Siempre que se han presentado, los georgianos han pasado a la final, por eso creo que este año lo conseguirán merecidamente. Lo siento, pero nunca soporté a Sofia Nizharadze (Georgia 2010) ni a Eldrine (Georgia 2011), me parecieron propuestas aburridas, por eso me alegro del giro que da Georgia este año.
Como conclusión tengo que decir que no veo ganando a ninguna de estas propuestas excéntricas. Tal vez, lo que más cerca quede del primer puesto sea la canción de Rusia. Más rezagadas en la final pienso que quedarán las propuestas de Georgia e Israel, a quienes veo como finalistas. Tengo mis dudas a la hora de poner a Montenegro en mi porra de clasificadas: por la canción y la interpretación se lo merecerían, pero me hace dudar el hecho de que actúen primeros. Las otras propuestas frikis que he enumerado, no creo que tengan mucho que hacer en un festival tan competido como este. Ojalá que si en futuros festivales de Eurovisión llegan propuestas excéntricas o frikis, sean propuestas de calidad, con composiciones buenas y con artistas consagrados. Ser excéntrico no está reñido con llevar un producto solvente. Todos lo agradeceremos.
Qué me gusta a a mí Jaume con sus opiniones. Coincido en muchas cosas, pero quería destacar, sobre todo, que encuentro necesario que haya crítica social en Eurovisión. Me alegró el tema portugués del año pasado (aunque su crítica era demasiado cutre), igual que me alegra la de Montenegro este año. Sin embargo, aún falta tacto o elegancia al hacerlo. Sigo esperando una canción fina y crítica a la vez.
Casi, casi me ha dolido que mis pseudocompatriotas Trackshittaz estén en el grupo de los frikis. Cómo se enteren por aquí… Muy de acuerdo con tu vaticinio ruso. ¿Top 10, 5 o 3?
Jaume! Mi vida que te voy a decir ….maravillosa columna, me lo estáis poniendo muy difícil para cuando llegue mi momento, en fin… pues mira a mi Holanda me parce maravillosa tal y como dice JuanPa me recurda mucho a Amy Mc Donald o incluso en según que acordes a Adele (pero menos), totalmente de acuerdo con Montenegro, es un cantante de muicha calidad y hace falta crítica social y Katescarlascharlottes no las veo por la labor de criticar la política del euro con sus toneladas de silicona y bottox, además la mezcla de sonidos me parece excelente en el tem, Austria si que me gusta, aquí coincido con Jonathan y tras el batacazo de Salcedo su puesta en escena va a dar mucho que hablar, de Rusia paso ya se ha dicho todo son de lo peor y hubiera metido aquí a Lituania no por el tema sino por lo de la venda en los ojos…se puede ser mas obvio y más ridículo? en fin this is our life our friends…
Estoy de acuerdo en muchos puntos del comentario de juanpablo. Las rusas por mi se pueden ir dando la vuelta nada mas que lleguen a Baku, porque no aguanto la cancion y lo que mas me repatea, es que se esta hablando de que quedaran bien por ser Rusia, y además están segunda en las casas de apuestas…si esta canción y a estas señoras las llevara España, alemania, Francia, etc…estariamos hablando de un bottom de manual. Eso es lo que me molesta de las apuestas frikis, que segun que paises las lleven quedaran mejor o peor, como el caso de la Verka esa que yo no aguanto, un segundo puesto me parecio excesivo… De Montenegro ya ni hablo…porq para que regresen con eso…por muy conocido que sea el y profesional, por mi se podian haber ahorrado el dinero.
En cuanto a Austria a mi es una canción que me gusta, me parece divertida, no me mata, pero si creo que estará en la final…por ser en su semi lo mas diferente y por actuar de las ultimas. Holanda ni me gusta ni me disgusta, pero se quedará ahí, esta en una semi muy dura. Y georgia, el año pasado no me gustaban y este año me horroriza…espero que como ya vimos el año pasado con Armenia y Turquia, este año sea Georgia la que se quede en la semi.
Aunque no comparta tu opinión muy buena columna jacques. Y por cierto yo no soy de los eurofans que esperan divas de ventilador jajaja no me suelen gustar.
Celebro que la propuesta letona no se haya tratado de «friki» en este artículo 🙂
Yo no sé si el eurofan medio espera sólo Carolas o Kates, yo creo que la mayoría esperamos calidad y para mí Montenegro no la tiene. Que sea una crítica social o no me da igual si musicalmente el tema me espanta. Lo de las abuelas pues otras cuyo tema no aporta tampoco nada y espero que regresen a su aldea y a su calceta a la primera de cambio por muy entrañables que la gente las vea. Espero que el jurado las ignore que es lo que se merecen. Lamentablemente no quedarán muy mal. La canción de Georgia pues también otro espanto y después de la corta pero interesante trayectoria de este país pues no entiendo la elección de este año. En cuanto a Holanda pues a mí me parece preciosa y para nada antigua.
Estoy de acuerdo contigo con que propuestas excéntricas deberían ser siempre bienvenidas siempre que tengan calidad. La variedad es lo que hace grande Eurovisión.
Enhorabuena Jaume, una visión con la que muchos estamos de acuerdo, coincido contigo en casi todo, menos en que yo, si que creo que Holanda estará en la final, a pesar de que suene antigua como dices, pero creo que es una canción de calidad y no creo que el disfraz de arapajoe distraiga lo suficiente como para que su canción pase desapercibida.