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Braulio, nunca sobran las palabras

Braulio fue el representante español en Eurovisión 1976 y los eurofans le conocemos por su espléndida interpretación de “Sobran las palabras” en La Haya, donde apenas consiguió 11 votos y el 16º lugar. Según reza su página web, Braulio es un cantante y autor que afronta su trabajo desde una perspectiva poco usual en otros compositores de música ligera: procura describir en sus canciones situaciones que tengan conexión con la vida real, alejándose del camino trillado y de las abstracciones. Sus obras son pequeños relatos de tres o cuatro minutos, que muchas veces encierran profundas moralejas. En algunos temas emplea algo que maneja con aparente facilidad: un humor fresco y descarado. ¿Qué os parece si conocemos algo más de su carrera discográfica?


Braulio nació en Santa María de Guía (Gran Canaria) en 1946. Después de una vida artística que le ha llevado a vivir durante años en Estados Unidos, actualmente reside en el lugar que le vio nacer. Allí se ha comprado un viejo caserón donde vive con tres caballos, siete perros, y un montón de patos, conejos, gallinas, palomas y dos canarios, que suman sus cantos a los de una infinidad de pájaros silvestres.

Siendo un veinteañero hizo sus primeros pinitos artísticos en Canarias, donde llegó a ganar en 1973 el Festival de Amateurs del Noroeste con la melodía “Mi amigo el pastor”. Ese mismo año participó en el Festival de Benidorm con la canción “A mi guitarra”, compitiendo con Nydia Caro, José Vélez o Emilio José. En 1974 se volvería a presentar al festival de Benidorm con «Un año tal vez».

La fortuna le sonrió al año siguiente, cuando participó en el Festival de Alcobendas. Se presentó con la canción “Carmen Mary” y le dieron el premio de la Crítica, de la Popularidad, la Mejor Canción y la Mejor Interpretación. Al año siguiente volvió a participar en el mismo festival, obteniendo el primer puesto con “La balada del triste despertar”.

En 1975 se convirtió en una estrella gracias a su participación en el Festival de Benidorm, donde ganó la Sirenita de Plata con el tema “Déjalo volver”, con la que obtuvo el Premio de la Crítica y el de Mejor Intérprete.

Poco después editó su single “La cerillera”, una de sus melodías más recordadas de aquella época por lo atrevido de la letra.

En 1976 se presentó al programa Hacia el Eurofestival’76 con vistas a representar a España en La Haya. Ganó el pasaporte a Eurovisión gracias a una votación popular de los espectadores de TVE. Su estilo contrastaba con el de la mayoría de participantes de aquella edición, los grupos a lo ABBA, razón por la cual se quedó en 16º lugar. A su regreso, declaró en la revista “Hola” que se llevó un gran disgusto con su clasificación, “pienso que me merecía por lo menos un quinto puesto. Además, para qué me voy a preocupar si este festival, como muchos otros, está manipulado”. Dijo que la orquesta de la NOS dejaba bastante que desear: “en España hay un montón de orquestas que podrían darle cien mil vueltas”.

Como suele pasar con el Festival de Eurovisión, muchos de los cantantes que despotrican del certamen, suelen intentar volver de nuevo al concurso. Solo dos años tardó Braulio en volver a ver su nombre vinculado al de Eurovisión. En 1978 compuso junto a Aniano Alcaide (coautor del Vivo cantando) un tema titulado Mi pueblo y lo presentó a la selección interna de Eurovisión para ir a París. El intérprete fue el periodista José Domingo Castaño y quedó en segundo puesto en la preselección, tras José Vélez.

El siguiente hito en la carrera musical de Braulio se produce en 1979, cuando gana el primer premio y la Gaviota de Plata en el Festival de Viña del Mar de Chile con la melodía “A tu regreso a casa”. Obtuvo galardones en Rostock (Alemania, 1980) y Yamaha (Japón 1982).

A esa época pertenece una anécdota que le honra como artista: en 1981 se presentó al Festival de Benidorm cantando “Con su mejor amiga”. Horas antes de la final se filtró la noticia de que la casa discográfica de cierto participante había comprado al jurado y que su victoria sería inevitable. Braulio presentó su canción el día de la Final pero mientras la cantaba hizo un alto para declarar que se retiraba del concurso ante la sorpresa de espectadores, organizadores y miembros del jurado. Al final, aquel cierto participante acabó llevándose la Sirenita de Oro.

Fue entonces cuando se planteó la posibilidad de vivir al otro lado del charco y se afincó en Estados Unidos. Corría el año 1983 y allí tuvo que volver a empezar su carrera desde cero. Con el tiempo y después de mucho esfuerzo, en América Latina y Estados Unidos ha conseguido un respaldo muy consistente de los medios especializados y del público. En 1986, por ejemplo, gozó de un gran éxito con la canción “En bancarrota”.

A mediados de los 80 recibió varios títulos honoríficos, aunque lo más destacado fue su nominación a un premio Grammy en 1988 por “Lo bello y lo prohibido”. Su popularidad en Miami fue tal que el alcalde de la ciudad proclamó el 24 de agosto de 1991 como el día de Braulio.

Algunas de sus canciones han sido utilizadas como bandas sonoras de varias telenovelas latinoamericanas emitidas en Univisión y en Telemundo. El tema «Un tiempo para nosotros» lo compuso para telenovela «Angélica mi vida» y la melodía “En la cárcel de tu piel” sonó en “Por ti, Laura”.

A lo largo de su carrera, la compañía Sony de Estados Unidos le ha concedido cinco discos de oro y un disco de platino por su álbum “Con todos los sentidos” (1988). A ese disco pertenece la canción «Amándote, soñándote», compuesta para la telenovela «Amándote».

Vuelve a nuestro país a finales de los 90 y recibe varios homenajes en Canarias. Sin duda, el que más le llenó de orgullo fue su proclamación como hijo predilecto de su ciudad natal, Santa María de Guía, en el año 2000.

En el año 2003 participó en el concurso “Vivo Cantando” de Telecinco, clasificándose en 2º lugar, a sólo 1 punto de la ganadora Karina. El hecho de estar semanalmente en un show televisivo le permitió que la audiencia le recordase y grabó un disco titulado “El regreso”. Aquí tenemos un divertido single extraído de aquel disco, “El diablo por viejo”.

Jacques dice:

Curiosa la carrera de Braulio. A veces nos quedamos sólo con la canción que llevaron a Eurovisión pero es una gozada descubrir peripecias vitales y temas tan interesantes como los que hay colgados aquí.