8 millones y medio de euros = victoria en Eurovisión

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Muchos han sido los ríos de tinta que han corrido en todo el mundo tras la victoria el pasado 24 de mayo de Dima Bilan en Eurovisión. Mucha de esa tinta es del país ruso que representaba el cantante. Además de felicitar y alabar la victoria, se especula sobre dónde acogerá Rusia el Festival del 2009 (parece que será Moscú), pero lo último que la prensa local rusa comenta es sobre la manera de conseguir ese triunfo histórico ruso: la gran inversión.

Hasta 10 millones de dólares llegan los gastos de todo lo invertido entre la discográfica y la televisión rusa. Al parecer, el interés del artista y de sus discográfica, que tenía ya previsto lanzar 3 álbumes en tres idiomas diferentes (ruso, inglés y castellano), ha sido trascendente. De los 10 millones, 8,5 corrieron a cargo de la discográfica (alucina) y el otro millón y medio salió de los bolsillos de la televisión rusa (toma nota TVE) que llevaba años buscando esta victoria.

Como anécdota, se dice que era tanto el interés y el dinero invertido, que, una vez en Belgrado, la delegación rusa cambió por completo su puesta en escena a tan sólo unos días del Festival, ya que vieron tras el primer ensayo que no era tan efectista y que la victoria se les podía escapar de las manos por la ucraniana Ani Lorak. Meses de ensayo planificados fueron a la basura, todo por ganar.

También ha visto la luz el telegrama que el ex Presidente Ruso, Vladimir Putin envió a Dima Bilan hasta Belgrado horas después de su triunfo en el Festival: «La victoria que has conseguido ha sido gracias al duro esfuerzo de todo el equipo de la delegación. No es sólo un triunfo personal de Dima Bilan, sino que es otro triunfo para toda Rusia. Gracias por llevarlo tú de la mano y dar la cara«. Tras su sentenciante y patriótico telegrama, el ex presidente ordenó, ese mismo domingo, la creación del Comité Organizador para preparar el Festival de Eurovisión 2009.

Por otro lado está la polémica suscitada por los parlamentarios de la ciudad de San Petesburgo, que hace unos días discutieron acaloradamente sobre si a su ciudad le interesaría o no ser sede del Eurofestival. Lo que para unos sería un gran acontecimiento, para otros resulta que es: «la droga y la perversión se darían cita. Está constatado por estudios de las policías de las capitales que acogen el Festival, que el incremento de droga y conflictos aumentan los días del concurso. ¿Queremos que nuestros jóvenes vean y convivan con esto?«, dice sin cortarse un pelo uno de los parlamentarios que ha denunciado a la Gobernadora Jefe del Estado esta situación para que San Petesburgo en ningún momento sea ni candidata, ni mucho menos sede del Festival.

Veremos qué pasa… lo que está claro es que Rusia traerá, como ya hace, ríos y ríos de tinta… y deja claro que hay que invertir para ganar… ¿qué opináis?