¡Últimas noticias!

¿No has visto los ensayos? El resumen de toda la semana, aquí.

Una semana entera de ensayos da para mucho y, como es difícil mantenerse al día de tanto análisis, comentario, resumen y novedad, os dejamos aquí escrito qué nos han parecido las actuaciones de los 39 participantes de Eurovisión 2021 según hemos ido viéndolos desde que el sábado 8 empezaran a ensayar en el Ahoy Arena de Róterdam. Recuerda que puedes ver nuestras emisiones en directo y todos los resúmenes desde nuestros canales de Youtube y Facebook.

SEMIFINAL 1

En la primera semifinal, rápidamente destacó la profesionalidad demostrada por el equipo lituano, con una actuación perfecta desde la primera ejecución. Rusia fue el primer gran golpe de efecto con una interpretación de primera de Manizha y una puesta en escena llamativa. Tusse, por Suecia, ha desencantando más que gustado, con un atuendo excesivo y algunas dudas técnicas en su presentación mientras que Irlanda ha ido de desastre en desastre por culpa de una idea escenográfica excesiva e innecesaria que Lesley no atina a defender con solvencia. 

Por su parte, Chipre ha elegido muy bien su concepto visual para «El diablo» y la Tsagrinou defiende bien sus posibilidades de convertirse en la mejor canción de su estilo en esta edición, por delante de Albina por Croacia (que mantiene sus posibilidades de clasificación), de Eden por Israel (con una apuesta juvenil y fresca que no deja de ser interesante) y de Efendi por Azerbaiyán (que ha defraudado con una presentación bastante descafeinada).

Una de las actuaciones que más nos ha enganchado desde el primer ensayo ha sido la de Bélgica, con una historia contada que llega a la primera y que concuerda perfectamente tanto con el espíritu de la canción como del grupo, que demuestra una profesionalidad y experiencia que pocos llegan a igualar en la competición de este año. 

La semifinal la cierran dos favoritos: uno, Malta, con Destiny en un gran momento vocal que tiene que presentarse en cambio con una propuesta escenográfica correcta pero bastante discreta. Sus augurios de favorita han decaído, no obstante, durante la semana de ensayos. Por contra, han aumentado los de Ucrania, con una canción difícil pero con una apuesta visual y vocal de primera: original, distinta y muy atractiva desde la primera visión. 

Quedan a medio camino las participaciones de Eslovenia, con una performance vocal de primera pero una presentación mucho más discreta; Australia, de la que hemos visto (pero no oído) la actuación pregrabada que se usará en la gala y que parece ofrecer ciertas esperanzas de clasificación; y la de Noruega, muy bien de voz y actitud pero con las dudas de que su recargada escenografía convenza a todos los públicos.

Para terminar, parecen más descolgadas Macedonia del Norte, con una actuación muy dramática e intensa casi sacada de Broadway pero que no ha convencido en general, con un trabajo escenográfico bastante barroco; Rumanía, en cambio, tiene un concepto acertado para el tipo de canción, pero técnicamente deja bastante que desear y provoca más ansiedad que agrado al verlo, además de que Roxen no está acertada vocalmente.

Finalistas claras: UCRANIA, MALTA, RUSIA, SUECIA, LITUANIA, CHIPRE Y BÉLGICA.

Finalistas posibles: NORUEGA, CROACIA, AUSTRALIA, AZERBAIYÁN.

Descartables: ISRAEL, RUMANÍA, ESLOVENIA, MACEDONIA DEL NORTE E IRLANDA.

SEMIFINAL 2

La segunda semifinal empieza con el ritmo y la fiesta que Senhit y el equipo sanmarinés, apuesta muy recargada y excesiva pero que funciona fácilmente y tendrá su premio como finalista. Igualmente funciona de forma sobresaliente la presentación de Islandia, con un Dađi Freyr en estado de gloria que puede conseguir lo que ningún islandés ha hecho hasta ahora en Eurovisión. Igualmente, Bulgaria ha desempeñado un trabajo excelente con un pack canción-cantante-escenografía de primer nivel que tendrá recompensa segura el día 22. Finlandia, por su parte, es una apuesta clara gracias al buen show que presentan, en línea con lo que se espera de un grupo de este estilo musical.

Por el lado de las sorpresas positivas de la semifinal contamos con Austria, con un staging discreto pero muy acertado y una entrega de Vincent que convence y le coloca con posibilidades de clasificarse. También con Serbia, frescas, genuinas y con un poderío vocal y coreográfico difícil de igualar en este año. Y, por supuesto, con Portugal, cuya canción no suscita emoción en muchos seguidores pero que está presentada de una forma tan elegante, con tanta clase y a un nivel tan cautivador que puede convertirse en una de las grandes alegrías de esta edición.

Por el de las negativas, Grecia, con una idea en escena que retoma el show propuesto por Sergey Lazarev en 2016 con la ayuda de las nuevas tecnologías (que aún necesitan rodaje dado que técnicamente no están afinados); Polonia, que no consigue transmitir prácticamente ninguna emoción positiva en torno a su presentación, vocalmente muy débil y visualmente pobre; Albania, que ha desaprovechado una canción bonita y una voz espectacular para lucir una escenografía simple y básica en la que Anxhela es la protagonista física, pero olvidando el tirón étnico tan aprovechable que tiene su tema; y Suiza, gran favorita para la victoria que se complica la vida con un concepto postmoderno, raro y complicado en el que Gjon se encuentra bastante perdido e incómodo.

En tierra de nadie vemos a Estonia, con una canción discreta y un intérprete correcto que, si bien no hay nada que criticarle, todo hace pensar que no esté en la final, quizás solo por el hecho de que la competencia llame más la atención; la República Checa tiene una idea similar a la israelí, con una coreografía muy fresca, muy urbana y juvenil, pero con un tema débil y un Benny Cristo algo frío frente a cámaras; Moldavia ha dejado con las ganas de disfrutar de un show que recordara más a la estética del videoclip, pero su apuesta a la baja por un show mucho más estático y centrado en la coreografía nos ha desencantado bastante; y Dinamarca, que se ven afectados por el uso masivo en casi cada canción de la iluminación y fondos con neones en rosa y azul, idea inicial de los daneses desde su Dansk MGP, que casi todos han ‘copiado’, unido a que un escenario más grande y la ausencia de la orquesta devalúan un poco el conjunto.

Por último, descartables Georgia y Letonia, difícil de verlas en la final con dos temas que no han captado la atención de casi nadie a pesar de presentar dos ideas en escena bastante aceptables.

Finalistas claras: BULGARIA, ISLANDIA, SUIZA, PORTUGAL, FINLANDIA, GRECIA, SERBIA Y SAN MARINO.

Finalistas posibles: AUSTRIA, MOLDAVIA, ALBANIA, DINAMARCA.

Descartables: LETONIA, ESTONIA, REP. CHECA, GEORGIA Y POLONIA.

FINALISTAS

Poderío rockero en escena, en la voz de Damiano y en el espectáculo formidable de los Måneskin por Italia, que hacen de su show una muestra de verdadera profesionalidad y maestría que les han impulsado en las apuestas hasta colocarlos como posibles ganadores de Eurovisión 2021. Junto a Francia, cuyo show basado en el que ya vimos en su selección nacional ha conseguido hacer casi una obra de arte con una actuación sencilla pero tan mágica como pasional. No son necesarios conceptos complicados ni cachivaches imposibles para saber transmitir el espíritu de una canción.

En el lado contrario, las actuaciones de Reino Unido y Alemania. Los primeros, tan perdidos como siempre, con una escenografía básica y anticuada, apoyada por dos trompetas bastante ridículas tamaño ‘extralarge’ que bien podrían haber dejado en Londres ya que no ayudan en nada a un perdido James que hace lo que puede por salvar su actuación. El alemán Jendrik, por su parte, apuesta por algo más infantil, casi una canción y un show del Eurojunior, con tres bailarinas con trompetitas, una mano danzarina con cara y un montón de gráficos tipo tebeo que no logran levantar el conjunto. Y más aún si consideramos que el voto infantil pueda caer rendido ante la actuación islandesa más que ante la alemana.

En medio, los anfitriones, que apuestan por un show con mucha presencia de lo tribal, como corresponde a su canción, y un buen desempeño tanto visual como artístico de Jeangu y sus colaboradores.

Sí, falta comentar el ensayo de España. Lo haremos en un post exclusivo para ello. ¡No te lo pierdas!