Irlanda anhela verse en la final con Brooke Scallion

Hay que remontarse a 2015 para encontrar la última preselección pública irlandesa; años de sinsabores tras elecciones internas, han motivado este cambio de estrategia. El formato Eurosong volvía a los estudios de la RTE con seis canciones seleccionadas entre las 320 recibidas. Entre los finalistas estaba Brendan Murray (2017). La final se celebró el 4 de febrero y la decisión la tomaba un jurado de artistas irlandeses, otro internacional y el televoto. Aunque el jurado en el estudio la dejó penúltima, el internacional y el televoto dieron su 12 a Brooke que ganó el ticket irlandés a Turín.

Desenfadada, descarada y pegadiza son adjetivos que etiquetan a That’s Rich, una canción pop rock que bebe de Blondie, ídolo de la cantante, de la banda postpunk americana The Gossip y de la primera Avril Lavigne y aquel skate punk de principios de este siglo. La letra describe a una Brooke empoderada que rechaza tener que ser pareja de alguien lleno de ego a cambio de regalos y prebendas pero que nunca entiende sus necesidades reales.

Brooke Scallion nació en 1999 en la pequeña pedanía de Bellaghy, en pleno Ulster, también origen del nobel de literatura Seamus Heaney. Desde pequeña participó en musicales y estudió Arte Dramático. Su salto a la fama llegó en 2020 con su participación en la 9ª temporada del talent show La Voz en su versión británica, donde finalizó tercera. Fuera de la música, Brooke es agente inmobiliaria en el condado de Antrim.