Australia envía a Montaigne a Róterdam
Australia se ha tomado en serio lo que a muchos en 2015 nos pareció una anécdota. El 8 de febrero ha realizado su segunda preselección televisada, Australia Decides, una vez más presentada por Joel Creasey y Myf Warhurst desde el Exhibition Centre de Gold Coast. Con un marcado estilo anglosajón, en 2 horas y 40 minutos (con una de publicidad) pudimos disfrutar de un show moderno y dinámico en el que además de los 10 participantes, oímos a Kate Miller-Heidke, Måns Zermerlöw y Jordan Anthony (JESC 2019), escuchamos los buenos deseos de Jon Ola Sand y presenciamos el anuncio de retorno de Dami Im para 2021. Finalmente, un jurado de cinco miembros y el televoto, a partes iguales, eligieron a la ganadora, la solista Montaigne.
Don’t break me ha sido compuesta por la propia intérprete, Anthony Egizii y David Musumeci. Estos últimos son conocidos en el mundo eurovisivo por ser los autores del We got love de Jessica Mauboy (2018) y del Sound of silence de Dami Im (2016), además de por haber colaborado con otros eurovisivos australianos como Guy Sebastian (2015) y Kate Miller-Heidke (2019). La canción gira en torno al grito de desesperación de ese momento en el que el desengaño empieza a vencer al amor y que lleva hacia la ruptura de una relación. Para Eurovisión, su propuesta artística está, curiosamente, inspirada en un Pokemon, Mr. Mime, del que adopta su vestuario y su actitud en escena.
Jessica Alyssa Cerro nació en Sídney hace 24 años, de antepasados españoles, argentinos, filipinos y franceses. Debe su nombre artístico al filósofo francés Michel de Montaigne, escéptico y padre del ensayo moderno. A pesar de eso, no se considera escéptica y prefiere hacernos reflexionar a través de sus coloridas interpretaciones definidas por ella misma como pop art. Posee ya dos álbumes en el mercado. El primero, Glorious Heights, lanzado con tan sólo 20 años, alcanzó el número 4 en las listas australianas. Gracias a él ganó el premio ARIA al artista revelación. En 2019 lanzó el segundo (Complex), de momento, con menos éxito.
Por David Feijoo
