Austria, a traspasar los «límites» con Pænda
Presentada el pasado 8 de marzo, la recepción de Limits de Pænda en Austria fue más bien limitada en sus primeros días, por la coincidencia en la fecha con el nuevo single de Conchita Wurst (ganadora hace ya cinco ediciones) en su evolución en matar a su personaje de mujer barbuda y dar salida a su álter ego, Tom Neuwirth. Una semana antes, el representante austríaco del año pasado, Cesár Sampson, publicaba también su nueva canción, lo que ha hecho que pesara el recuerdo de los últimos años de Austria en Eurovisión, más que lo que se presenta en este año. Tal vez el tercer puesto conseguido por dicho cantante, una de las sorpresas del último festival, haya pesado en la elección de Pænda este año: de nuevo una persona con experiencia en el mundo de la música, pero bastante desconocida.
Pænda se presenta al público como una cantante de pop electrónico cuyo estilo no parece ser el de su canción Limits. Ella misma anunció a los medios, al conocerse que era la representante austríaca, que su canción no era lo que se esperaba para aquellos que la conocieran. Entre sus cantantes favoritas destacan, por ejemplo, Dua Lipa, Robyn o Madonna (Frozen es una de sus canciones favoritas de todos los tiempos).
Gabriela Horn nació en Deutschlandsberg (estado federal de Estiria) en 1988 y para continuar con sus estudios decidió asentarse en Viena, donde recibió formación musical relacionada con los estilos de música pop y jazz. Como muchos otros representantes eurovisivos de las últimas décadas, tuvo su experiencia televisiva, presentándose al casting del programa Popstars de la televisión alemana. Desde el año 2016 es conocida como Pænda en el ambiente musical austríaco, tomando el nombre del oso panda, pues dice sentirse así por las mañanas. Hasta el momento ha publicado singles como Waves (2016), Good girl y Paper-thin (2018), canciones incluidas en su disco del mismo año Evolution I. Cuando este artículo vea la luz, Pænda habrá publicado su segundo disco, Evolution II. La música no es su única ocupación, pues Gabriela Horn trabaja como profesora de canto en una localidad cercana a Viena.
Su perfil recuerda tanto a Cesár Sampson como a Nathan Trent: los dos fueron escogidos por elección interna, tenían una sólida formación musical, así como cierta experiencia y repercusión anteriores a su participación en el festival. En ambos casos la fórmula funcionó, pues estos dos representantes consiguieron en sus respectivas ediciones pases a la final.
La canción Limits (compuesta por ella misma) fue dada a conocer en el morning show de la radio musical astríaca, en el programa Der Ö3-Wecker. Tanto los que están a favor como en contra repiten lo mismo: a los que le gusta el tema creen que es una buena canción, moderna, actual, llena de sentimientos,… Sin embargo, a los que no les gusta tanto repiten que le falta algo, que se esperaban algo más potente, etc. Es decir, algo parecido a lo que se dijo el año pasado de la canción austríaca Nobody but you, que acabó con una muy buena puntuación gracias a la valoración de los jurados. Habrá que ver si la chica del pelo azul consigue el pase a la final y de nuevo un puesto inesperado para la historia de Austria en el festival.
Por Guillermo Herráez