¡Últimas noticias!

50 años del Massielazo en Londres

Aunque en sus últimas entrevistas rezuma una leve amargura fruto del encasillamiento histórico que solo la recuerda relacionada con el Eurofestival, la Massiel que se quiso comer el mundo a los 20 años todavía conserva la energía y contundencia verbal que la ha acompañado desde adolescente. Como cuando bajaba a la Gran Vía a comprar la «Marie Claire» en minifalda y las kioskeras – «vestidas como Doña Rogelia», recuerda la artista – se negaban a dársela  y llamaban a los guardias de tráfico para que  la fuesen a detener por escándalo público.

Aunque ya contada miles de veces, no podemos dejar de recordar la historia de Massiel y como acabó de rebote en Eurovisión. Ahora que las candidaturas suelen estar pensadas de un año para otro, la improvisación no tiene lugar al enviar cada país con semanas de antelación la puesta en escena requerida por la televisión organizadora.

En 1968 TVE anunció en enero la elección de Joan Manuel Serrat como su representante para el festival de Londres. En aquel mes, Massiel, de 20 años, estaba en Cuba promocionando sus éxitos «Rosas en el mar», «Aleluya», «Rufo el pescador»… canciones de hondo significado social y político que la habían aupado al nº1 de ventas en España y muchos países de América Latina. Su padre, Don Emilio Santamaría, antiguo sastre gijonés reconvertido en representante de artistas, la acompañaba en aquel periplo. Había logrado firmar contratos cuantiosos para continuar hasta el verano por México.

 

Durante febrero y marzo, Serrat, de 24 años, recorrió televisiones europeas. Le faltaban la francesa y la yugoslava para la semana anterior a su viaje a Londres. En aquellos tiempos, los lunes no había prensa. Así que cualquier comunicado o noticia dominical tenía que esperar al martes.  El lunes 25 de marzo, sorprendentemente, los principales medios españoles reciben una carta de Serrat anunciando que solo acudirá a Eurovisión si es interpretando en catalán el «La, La, La,  que se había dado a conocer el 8 de marzo en un programa de televisión presentado por Jose Luis Uribarri.  TVE responde con un comunicado . Ambos documentos se hacen públicos el martes 26 a través de los medios.

 

Para entonces, TVE había tomado en consideración que quien sustituyese a Serrat debería ser alguien de Zafiro, su misma discográfica ya que esta había pagado mucho dinero promocionando el tema, a Serrat por Europa y los arreglos de Ben Kaempfert, prestigioso arreglista alemán de entre otros, «Strangers in the night». Los nombres que estuvieron sobre la mesa fueron Marisol, Rosalía y Massiel. El Dúo Dinámico, representados al igual que Serrat por Lasso de la Vega quedó descartado por ser de otra disquera. Karina se autodescartó por que en aquel momento era nº1 con «El baúl de los recuerdos» tal como contó en el 26º Congreso AEV de Medina del Campo. Enrique de las Casas, productor de TVE convenció a Juan José Rosón, presidente de RTVE que la única artista de las citadas que pudiera hacer aquel encargo en tiempo récord era Massiel. Pero estaba en México.

Massiel está en esos días en Guadalajara, provincia de Jalisco. El mismo lunes, recibe siete llamadas telefónicas desde Madrid para que vuelva en el primer avión. Su padre no quiere que vaya a Eurovisión porque quiere construirle una carrera en América como más tarde haría Julio Iglesias, primero conquistando el mercado latino, luego el estadounidense.  Ella siente que tras seis meses en América es hora de conquistar Europa. Don Emilio se lleva las manos a la cabeza y ambos se suben en el primer avión rumbo a Madrid.

Aterrizan la tarde del martes 26 donde la espera una nube de periodistas, y directamente se van a TVE. Le enseñan la canción, y le dicen el motivo por el que Serrat ha renunciado- ella pensaba que había sufrido algún accidente -. Mientras ensaya los primeros acordes y le dicen que el miércoles por la tarde se tiene que ir a París de promoción,  se da cuenta que aquel ritmo no pega con las canciones que ella había cantado hasta entonces vestida de largo y de negro. Y piensa en un modelo que había visto el mes anterior en la revista Marie Claire. Era de Courrèges y el modisto tenía el taller en la capital francesa.

 

 

El día 27 Massiel está en París por la tarde, ya ha dejado grabado el «La, La, La» en varios idiomas. Tiene un programa de radio y dos de televisión donde cantará la canción. El día 28 de marzo antes de tomar un avión a Belgrado para cantar en la televisión yugoslava se pasa por el taller y se paga de su bolsillo el traje que quiere. En TVE eso son cosas menores y dan carta blanca a la artista. De Belgrado se va directa a Londres, donde el día 2 de Abril comienzan los ensayos.

Allí la orquesta pide al Maestro Ibarbia acortar la canción unos segundos, se traspasan los 3 minutos reglamentarios por unas breves notas. Con el arreglo de Kaempfert puede dar más prestancia y allegro a la canción. Massiel ensaya y comienza a aparecer entre las favoritas para ganar. Pero estaba claro que el ganador sería Cliff Richard, jugaba en casa y era la estrella pop masculina de Reino Unido por encima de Tom Jones o Engelbert Humperdinck.

El Dúo Dinámico llega a Londres para el ensayo general, el día 5 de abril. En su hotel les espera Julio Iglesias, un joven estudiante gallego que había jugado en el Castilla FC de portero y tras un accidente se dedicaba a componer canciones. Les cuenta que presentará un tema al Festival de Benidorm – sería «La Vida sigue Igual» y ganaría – y que ha escuchado las favoritas de Eurovisión y no le cabe duda que ganaría Massiel.

Federico Gallo completaba la delegación española como comentarista para TVE. José María Iñigo estaba también en el Royal Albert Hall, era el corresponsal de la Cadena Ser en Londres. Todos contarían que el ensayo de Massiel había sido el más aplaudido, tras el de Cliff Richard.

España venía de quedar 6ª y 7ª consecutivamente con Raphael, y ahí terminaba su currículum eurovisivo. El sorteo determinó que Massiel cantaría en el puesto 15 – lugar que nunca hemos vuelto a tener de salida – de 19 participantes. La ganadora en el 62, Isabelle Aubret y la noruego alemana Wencke Myhre eran las otras favoritas.

 

El festival no fue de los mejores en cuanto a canciones y la calidad musical de la mayoría de sus temas no ha superado el examen del tiempo. Es inevitable achacar el buen resultado de Massiel a su energética y feliz actuación y no a posibles compras de votos, en un sistema en el que cada país tenía 10 miembros de jurado y cada uno emitía un voto individual. En total 180 jurados, menos los 10 españoles. Con solo 29 puntos, Massiel ganó por uno de diferencia a Cliff Richard y sacó 9 a la tercera, Isabelle Aubret.

El resto, ya es historia.