Peras al olmo
Patricia Pahiño /
Si es que ya lo dice la sabiduría popular: «No se le pueden pedir peras al olmo».
No, no se le puede pedir a La Dama que dé de sí más de lo que puede dar. Y eso, a día de hoy, la verdad, no es demasiado. A día de hoy, repito.
No, no se le puede pedir a Raúl que deje de ser quién es, que deje de desempeñar ese ¨rol¨ en el que parece sentirse tan a gusto, que ha decidido aferrarse a él por los siglos de los siglos… Allí , en su rinconcito, gustándose a sí mismo. Apelando de nuevo al refranero popular , aquello de ¨Virgencita, que me quede como estoy¨ o ¨Más vale malo conocido que bueno por conocer». En fin …
No, no se le puede pedir a Jorge, que… bueno, no sé muy bien qué es lo que no se le puede pedir porque, la verdad, soy incapaz de imaginar que es lo que puede dar. Pero eso sí, es tan mono…
No, no se le puede pedir a Brequette que no se desmorone ante la cuarta pared. Pero sí se le puede recordar quién es y a qué raza pertenece, esa raza de casta recia, de voces y caracteres rompedores, en los cuales la garra y la fuerza son parte de los genes. Esa raza que no se come esa cuarta pared, sino que la devora. Pero efectivamente y tal vez sigamos sin poder pedirle «peras al olmo» aún…
Y no… no se le puede pedir a una cantante de la trayectoria de Ruth que no grite, que no se deshaga en gorgoritos, que no sea técnicamente correcta, que no tenga tablas sobre las tablas… ¡Faltaría más! Ya son muchos años de entrenamiento…
Pero… ¡sí! Sí se le puede pedir, es más, se le debe exigir a una televisión pública que busque la mejor opción, y a una canción me refiero, para representar a ese país que la mantiene… Sin imposiciones de nadie.
Buscar la mejor canción, repito, y después encontrar a quien mejor la transmita. Y en el caso de este 2014 la mejor canción, sin lugar a dudas, (independientemente de las dudas razonables acerca de su ¨fuente de inspiración¨) ha sido Run. Y la mejor propuesta humana para llenar el escenario, Ruth.
Entonces, ¿qué hay que discutir?
Vamos a ver, señora Lorenzo, con todos mis respetos, su canción es un ¨pestiño¨ a mi humilde parecer. Y mal que a usted le pese, con lo cual, ¿a qué viene esa imposición a toda costa? (pregunta retórica, claro está, ya que de sobra es sabido que la pela es la pela… En Murcia, en Inglaterra y en todas partes…).
Y mi desencuentro no es usted, aunque para mí la honestidad es otra cosa, tal vez renunciar a intereses propios en favor de intereses comunes, tal vez… y más cuando hablamos de una televisión pública, repito, y no privada.
Mi desencuentro es más con esa cadena de TV incapaz de imponer la lógica y la coherencia sobre cualquier arrebato de divismo e interés personalizado.
Señores, hasta que no tengamos claro que en un festival como el de Eurovisión la única e insustituible diva es LA CANCIÓN, aquella que se vaya a colar en los corazones de quienes la escuchen, la sientan y la recuerden, y que el intérprete elegido, en este caso usted, señora Lorenzo, únicamente ha de intentar que esa diva aparezca ante los ojos del público como la más bella de todas…
Hasta que no tengamos esto claro y actuemos en conciencia, así nos irá… y así nos seguirá yendo…
Y una vez mas, y con todos mis respetos, Run es un traje de alta costura y su Dancing in the rain, un vestido de mercadillo…
Pero claro, tal vez solo es que «no se le pueden pedir peras al olmo»…
Y por supuesto, esto no es más que una opinión personal e intransferible… en tanto en cuanto los olmos no críen peras…