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Rezando por Eurovisión

reza conmigo

La oración es el esfuerzo de comunicarse con una divinidad para hacer una petición, rendir pleitesía o expresar pensamientos, reflexiones o emociones personales. A lo largo de la historia del Festival de Eurovisión han sido numerosas las canciones que han hablado en sus textos del rezo y por ello, acercándose unas fiestas como la Navidad, de corte tan religioso, vamos a recordar las canciones eurovisivas que se han alzado como plegarias en sus respectivas ediciones.

La primera que alzó su rezo en Eurovisión fue Nana Moskouri en 1963. Su tema se titulaba A force de prier (A golpe de rezar) y el objetivo de su oración era conseguir el amor. A fuerza de rezar y de cantar en última posición, Nana consiguió el 8º puesto por Luxemburgo, una clasificación bastante pobre para los éxitos que la Moskouri conseguía por aquel entonces en Europa. Habrá un par de griegas más que demostrarán lo que les gusta en Eurovisión estar rezando y con el mazo dando.

Portugal debutó en 1964 con un tema titulado Oraçao defendido por Antonio Calvario. En la letra, el protagonista de la canción acude a Dios consciente de que ha maltratado y herido a su amor, por lo que le pide el perdón a la divinidad. Su castigo ha consistido en vivir una vida sin amor y está harto de un peregrinar tan duro. La canción se quedó con un solitario cero en último lugar.

En 1976 la griega Mariza Koch alzó una oración a la virgen titulada Panaghia mou, panaghia mou (Virgen mía, virgen mía). Más que una plegaria, esta canción es un reproche a la virgen, que permite que un país sembrado de tanta belleza como Grecia pierda el patrimonio arquitectónico heredado de la antigüedad (Reino Unido no les votó, evidentemente) y acoja a refugiados, en clara alusión al conflicto de Chipre con Turquía. Toda una oración con indirectas internacionales que quedó en el puesto 13º.

La palabra “Aleluya” es una exclamación de júbilo originaria del judaísmo que significa “Alabado sea Dios”, “Gloria al señor”. Es el título de la canción que se alzó con la victoria en 1979 en las voces de Milk and Honey. La letra habla del rezo a la esperanza, al mañana y a la unidad entre las personas. Seguro que cuando Betty oyó la letra, se le pasó el mal rollito.

En 1994 nos encontramos al suizo Duilio y su Sto pregando. La letra de la canción es muy pesimista porque parte de la premisa que la vida es un gran dolor y por eso, el cantante alza su rezo para redimir a la humanidad de todas las desgracias. Concluye diciendo que la luz brillará para quienes sepan buscar el sol en la oscuridad. Todo un mesías dispuesto a traernos la paz. A cambio, se llevó el puesto 19º.

Amén es una palabra semítica que suele traducirse por “Así sea”. Los eurofans, siempre en nuestro mundo, la asociamos a Liora y a la canción de Israel en 1995, clasificada en 8º lugar. La letra es todo un ejercicio de pleitesía y agradecimiento a Dios por la esperanza, el amor y la vida. En esta oración hay, además, peticiones: “Bendice nuestros hogares, acércanos a nuestros sueños, abre nuestros corazones para que a ti te cantemos…”. Seguro que a Dana International se le pasaría el mal rollito por quedar segunda en aquella preselección israelí cuando captase los buenos sentimientos de la letra…

También en 1995 la griega Elina Konstantopoulou se preguntaba Pia prosefhi? (¿Qué rezar?) como clausura del desfile de participantes en el festival del 40º aniversario. Se llevó el puesto 12º. La oración a que alude la letra de este tema pretende ir en contra de aquellos que profanaron al pueblo griego y conseguir que los invasores purguen sus pecados. La canción griega de 1995 tiene un trasfondo político sin concesiones, como la de 1976, no siendo votada por ninguno de los países que ha tenido tensiones diplomáticas con Grecia a lo largo de la historia. Una curiosidad: la canción empieza con un fragmento en griego clásico y, hasta la llegada de Et Cetera (Irlanda 2009), era la única vez que se había hecho servir una lengua muerta en Eurovisión.

Eslovaquia se presentó por tercera vez en 1998 con la canción Modlitba, que también significa “Oración”. La letra de este tema alza la oración para evitar que el amor desaparezca. El objetivo es que el amor perdure en este valle de lágrimas y pueda salvarnos de la miseria. De nuevo, el amor como objetivo último de la oración. No hubo demasiada suerte: quedó en el puesto 21º.

La oración que propuso Marija Serifovic en 2007 se titulaba Molitva, casi igual que la eslovaca del 98. En este caso, la oración se alza como respuesta a la falta de amor y como solución a la mentira y a la miseria. El último verso del tema es muy explícito: “Tu nombre es mi oración”. Arrasó y se llevó la victoria.

Jacques dice:

Bueno, ¡¡¡pero ha acabado en 4!!

danivega dice:

por cierto que al final no ha sido el 14, no? ni el mío tampoco… :p

Jacques dice:

Es que las oraciones son grandilocuentes. Lo malo es que no siempre quedan en buen lugar.

danivega dice:

La mayoría, temazos; curioso.

Jacques dice:

Rezamos por el ¡¡Catooooooooooooorseeee!!