Gran fiesta de bienvenida
Tras cambiar de sede unas cuantas veces, anoche se celebró finalmente la fiesta de bienvenida en Eurovisión 2008. El Palata Srbije o Palata Federacija fue el lugar finalmente elegido para congregarnos. El sitio es inmenso e impresionante y muy soviético. Grandes salones con enormes alfombras y lámparas gigantes para acoger la fiesta eurovisiva por excelencia.
El lugar era tan grande que, en ocasiones, no se sabía muy bien dónde estaba uno. Periodistas, fans y miembros de delegaciones se dieron cita en este inmenso pabellón para celebrar el evento eurovisivo y conocerse entre ellos.
De todos es sabido que uno de los objetivos de la fiesta es pillar a los cantantes «in fraganti» y hacerse la consabida foto con ellos. Los fans que tienen el privilegio de ser invitados a esta magnífica fiesta aprovechan cualquier momento para conseguir la ansiada foto y, de paso, comentarle al artista en cuestión las impresiones que su canción provoca entre la gente.
Evdokia, Tereza, Jeronimas, Kalomira, Sebastien, Gisela, Simon, Vânia, Elnur y Samir, Morena, Rebeka y algún que otro «Angel» estaban bastante asequibles. Muy simpáticos, aunque Rebeka, por ejemplo, estaba hasta las narices. Evdokia se encontraba relativamente sola mientras Kalomira se rodeaba de fans a los que regalaba sonrisas y besos. Muy divina ella. Morena estaba espectacular, aunque es muy poquita cosa y su mánager insistiera en que intercambiaba fotos por votos. Jeronimas era espectacular: muy alto y con una planta impresionante. Tereza, muy pequeñita pero muy muy agradable y realmente sexy (bastante más que Rebeka, por muy Miss que sea). Gisela, por su parte, es un encanto y estaba emocionada con todo lo que le decíamos. También vimos por allí a la maravillosa Maria Haukas Storeng, a Jelena Tomasevic y a Paolo Meneguzzi.
Intocables fueron Charlotte (evidentemente, rodeada de fotógrafos por todas partes – casi no podía andar entre eso y los taconazos maravillosos que llevaba), el trío Ani, Verka y Kirkorov (tuvimos un déja vu, ¿en qué año estamos? – por ahí estaba también Manolo, perdón Marija Serifovic), Euroband (divinos ellos, aunque no muy simpáticos), Sirusho (impresionantemente guapa), Dustin (y su artífice), el Chiki Chiki, Disco y Gráfica (absurdos: llegaron, comieron hicieron el tonto y se fueron) y Dima Bilan (sobrio, pero intocable).
Sin duda, lo más destacable fue la ausencia de muchos cantantes que todos esperábamos como Vlad Mirita y Boaz, entre otros. Para los que sepáis lo que son las fiestas eurovisivas os diremos que, afortunadamente, había abundante comida y bebida; es decir, un diez en eso para los serbios. Como hecho curioso, destacar lo jóvenes que eran algunos de los camareros. Realmente no sabemos si tenían la edad reglamentaria para estar tan cerca del alcohol. ¡Hablando de alcohol! Como pasaban con la bandeja con bebidas irreconocibles (excepto la cerveza, por razones obvias), alguno que otro eurofan tuvo una mala experiencia con unas copitas de licor transparente que eran alcohol de quemar como mínimo y que te hacían perder el estómago por unos minutos. ¡Madre mía, lo que inventaron los serbios para soportar la dictadura del Mariscal Tito!
En breve subiremos algunas de las fotos que hicimos anoche para que podáis haceros una idea mejor. En resumen, aprobada con nota la fiesta de Bienvenida serbia. Esperamos que todo lo sigan organizando tan bien.
¿Seguro que Boaz Mouda no estaba? Yo creo que sí estaba pero como mide 1,20 no lo visteis.
Me encantaron las salchichas de Burgos del final.